¿cuáles de los medios contraceptivos actualmente presentes en el mercado incluyen un efecto antiimplantatorio?, ¿qué mecanismos contribuyen a su acción farmacológica y en qué medida lo hacen?
En gran parte de la comunidad científica, así como del ámbito jurídico, al tratar del embrión no nacido, está vigente el criterio según el cual hay que definir el embarazo como el período que comprende sólo desde la implantación hasta el nacimiento natural. Esto lleva consigo otras novedades; por ejemplo, la redefinición de aborto como la eliminación del embrión sólo en ese período, o la extensión de la anticoncepción a cualquier medio que impida la unión entre los gametos como consecuencia de una relación íntima, o también que elimine el producto de la concepción antes de su implantación. De modo que la industria farmacéutica está lanzando al mercado, bajo el nombre de anticonceptivos, productos que actúan también mediante un mecanismo antiimplantatorio. Este hecho tiene grandes repercusiones éticas con relación al respeto del embrión, que obligan a reflexionar acerca de la valoración moral de la prescripción, dispensación y uso de estos medios.
Ahora bien, ¿cuáles de los medios contraceptivos actualmente presentes en el mercado incluyen un efecto antiimplantatorio?, ¿qué mecanismos contribuyen a su acción farmacológica y en qué medida lo hacen?
Esto es lo que hemos estudiado en este artículo, basándonos en la bibliografía científica disponible. Aunque no ha sido una tarea sencilla, puesto que los resultados aportados por la literatura varían mucho, se ha tratado de ofrecer una conclusión bastante precisa. Básicamente hemos cumplido un doble objetivo: actualizar y completar los estudios —pocos, parciales o lejanos en el tiempo— que tenían este mismo objeto; y ofrecer una valoración ética respecto al respeto de la vida naciente del uso de los anticonceptivos hormonales que pueden tener efecto antiimplantatorio.
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Efecto abortivo de los anticonceptivos hormonales. Una revisión